6 - The Book Of Souls –
2015
El
último álbum hasta la fecha de los británicos abre la parte final
de este top, y a saber si es su último disco, en especial por una
razón de sobra conocida, el cáncer que padeció Bruce Dickinson.
Tras varias declaraciones de la banda, parece ser que durante la
grabación del disco Bruce estaba un poco raro pero el cantante quiso
seguir adelante. Cuando el disco estaba en las últimas, en una mera
revisión como Dickinson menciona que acostumbra a hacer, se le
detectó cáncer en su garganta, por suerte no estaba muy avanzado y
se podría tratar sin ningún problema, y finalmente Dickinson venció
al cáncer... aunque con esta enfermedad nunca se sabe. Tras
recuperarse del cáncer, la banda decide aplazar el lanzamiento del
álbum para que Bruce pudiese recuperarse y estar en un estado físico
óptimo, porque el álbum estaba casi acabado a finales de 2014 según
la banda, pero la decisión comprensible de aplazarlo hizo que
prácticamente los fans tuviesen que esperar casi un año para
escuchar lo nuevo de la doncella, por Septiembre de 2015.
Este
álbum en su momento me produjo sensaciones buenas y malas. Había
canciones que realmente eran espectaculares,pero la producción final
lastraba bastante el resultado, con unas guitarras que no suenan tan
afiladas como en otros discos e incluso capadas. Pero con el paso del
tiempo el álbum me fue gustando más y más y a día de hoy me
encanta.
Pero
quiero hacer una aclaración y no niego que este Book Of Souls
esté muy arriba, pero hay un punto que no puedo olvidar, y es el
concierto de los británicos del Resurrection Fest de 2016.
Pensaba que nunca iba a tener la oportunidad de ver a Iron Maiden
en vivo, y eso me apenaba porque son mi banda favorita... que
viniesen a Galicia me dio la mayor alegría de mi vida y ese
concierto sigue siendo el mejor momento de mi vida hasta la fecha, y
admito que desde ese momento llevo el disco en el corazón. No es el
mejor, pero es el más especial para mí, y le tengo un cariño
superior a los 5 que vienen a continuación. Este reconozco que el
punto subjetivo es bastante mayor al del resto, y que está aquí más
por mi amor a él que por su calidad musical, que la tiene a patadas.
Llegados
a este punto no quiero entretenerme más y hablaré de las 3
canciones que sobresalen del disco, siendo la primera If Eternity
Should Fail, que tiene un 10 en el análisis del disco que hice
en este blog (insertar link) siendo para mí una de las mejores
canciones que ha hecho Maiden del 2000 para adelante y que para mí
va a acabar siendo un clásico de la banda, con uno de los
estribillos que más me gustan de toda la discografía sin ser nada
del otro mundo, lo reconozco, pero siempre que lo oigo los pelos se
me ponen de punta. La segunda es The Great Unkown donde quiero
repetir la frase de la reseña que hice... es mi debilidad, una
canción preciosa y que me enamoro desde la primera escucha, con unos
británicos espectaculares... esta me falto en el concierto del
Resurrection, pero no se puede tener todo en la vida. La última es
The Red And the Black, una
canción que al principio no la consideraba de las mejores pese a que
creía que era bastante buena (le puse un 8 en la crónica) pero que
desde el concierto me parece la mejor rivalizando con If Eternity...
con una parte instrumental final donde Maiden se desmelena y
demuestran que todavía están capacitados para crear pasajes
instrumentales épicos.
El disco más especial para mí, además, lo que me ayudo ese
concierto no está escrito. Gracias Maiden, la gente se llevará a la
tumba otros discos, pero yo me llevaré este.
5 –
Brave New World – 2000
Lo
primero es decir que desde este disco hasta el tercero he tenido
muchísimas dudas en el orden, la verdad, ya que para mí son discos
muy muy parejos, siendo este tal vez el menos redondo, pero a su vez
un disco sobresaliente. Brave New World fue el primer disco tras en
ansiado retorno de Dickinson y Adrian Smtih a la banda, con Janick
Gears sin ser expulsado, la banda pasó a tener 3 guitarras y el
feudo metalero tenía muchísimas ganas de ver como sonaba ese punto
en un disco. El resultado no pudo ser mejor, lanzando al mercado uno
de los mejores discos que la doncella jamás ha escribido, empezando
con esa modificación de formulas y toqueteando el estilo progresivo,
creando un disco que sonaba clásico pero a la vez fresco, un disco
que ya es uno de los referentes de la banda.
Tras unos años con una audiencia cada vez menor, este disco volvió
a catapultar a Maiden a lo más alto, que un año después realizaría
otro concierto inmortal en el festival Rock In Rio, editado en CD y
DVD, siendo uno de los mejores conciertos de la historia de la banda,
demostrando que la banda definitivamente había vuelto.
Pero centrándonos en el disco, es para mí el mejor tras la vuelta
de Dickinson, en dura pugna con AMOLAD y The Book of Souls, pero este
Brave New World tiene las mejores canciones tras la vuelta de Bruce a
la banda. Desde el principio al final el disco se escucha pese a la
longitud de las canciones y a que estas son bastante más densas que
las canciones que Maiden solía hacer, por lo que sí que es cierto
que a lo mejor a primera escucha la impresión no es del todo buena,
pero con un poco de paciencia se descubrirá una gran joya como es
este disco.
Entrando
con las 3 canciones, tenemos aquí canciones sobresalientes. La
primera es Ghost of the Navigator,
y realmente yo he llegado a tener una obsesión por esta canción,
pero obsesión de verdad. La canción es simplemente una de las
mejores piezas de la discografía de Iron Maiden, con una estructura
bastante compleja y bien estructurada, con su clímax en un
estribillo que nos volvería a hacer gritar y saltar a todos los fans
de Maiden, con una instrumental de lujo, donde las 3 guitarras
sonaban de fábula. La siguiente es una de las canciones más bonitas
y épicas de la discografía de Iron Maiden, es que realmente estaban
inspirados en este disco... ya que Blood Brothers
es una pieza que podría aparecer en absolutamente cualquier disco de
Iron Maiden y enriquecerlo. Es una cancionaza, no tan elaborada como
otras, pero que todo lo que propone lo cumple con creces. Las partes
instrumentales a día de hoy me siguen poniendo los pelos de punta...
y los solos son tremendos. Cuando tocaron esta en el Resurrection se
me cayó la lágrima. Por último, The Thin Line of the Love And
Hate, una de las olvidadas, pero una de las más grandes, con un
sonido bastante parecido al del X-Factor, sólo que con Bruce al
micrófono. Es sencillamente espectacular, situada como última
canción en el disco, rompe en cierta manera con todo lo escuchado
anteriormente para crear una canción que como he dicho ha sido
injustamente olvidada... Bruce se sale al final... la dejo aquí
abajo, tal vez no es tan épica como el resto, pero sobresale en
todo.
4 –
Piece Of Mind – 1983
La llegada de Bruce a la banda y el lanzamiento del disco The Number
of the Beast había provocado que Maiden alcanzase definitivamente la
fama mundial, entrando con fuerza finalmente en el mercado
estadounidense, que era el mercado que todavía se le había
resistido en la era Di'Anno. El tercer disco de Maiden fue el que
empezó a hacer que los británicos llenasen recintos de tamaño
considerable, no sin falta de polémica, por el diablo que acompañaba
a Eddie en la portada, algo que sí que hizo que pese a entrar en el
mercado estadounidense, el impacto no fuese el esperado del todo.
Así llega Piece of Mind, el disco de consolidación, el que asienta
al 100% a Maiden en todo en mundo. Tal vez el disco más continuísta
de la banda, es decir, en los discos de la doncella siempre hay
elementos comunes, Somewhere In Time es muy distinto de este Piece of
Mind pese a sus elementos comunes, pero este disco no se diferenciaba
tanto del Number, ya que sin duda Maiden quería aprovechar el éxito
que había sido en todos los aspectos el anterior disco, tanto a
nivel musical como a nivel comercial, con una incremento de las
ventas bastante considerale en función a sus dos primeros discos.
Piece of Mind no arriesga en ningún momento, pero funciona, la
esencia era bastante reciente y por lo tanto todavía sonaba bastante
fresca, no era necesario introducir cambios drásticos, pero sí
mantener el nivel. Tal vez es un mínimo bajón respecto a Numer, con
una cara B más floja (a excepción de The Trooper) pero que sigue
siendo un disco de sobresaliente.
Las canciones a destacar de este álbum son Where Eagles Dare. Un
sonido bastante parecido al disco anterior, como ya he dicho, pero
con una producción bastante mejor. Eso sí, mejoría bastante grande
en la interpretación de Dickinson, mucho más solida y sintiendose
mucho más cómodo que lo que había mostrado en el anterior álbum.
Una canción que también ha perdido bastante peso y ha sido
enterrada con el paso de los años, cuando es una canción
sobresaliente, unos Maiden que estaban en uno de los mejores momentos
de su historia, con esas guitarras melódicas y ese bajo dominador de
Steve. Quiero destacar otra de las canciones que junto a Judas Be My
Guide del Fear of the Dark, me parecen de las más enterradas de
todas la discografía de Iron Maiden... Die With Your Boots On. Sin
la epicidad del resto de las canciones tal vez, es posiblemente una
de las más pegadizas del disco, directa y sin complicaciones, tal
vez incluso más hard-rockera de lo normal para Iron Maiden, sin esa
epicidad y cabalgadas que están presentes en sus estribillos, pero
que cumple sobradamente, una canción muy sólida. La última, la
mítica... The Trooper, un himno que ha envejecido fantásticamente
bien y que ha día de hoy sigue siendo una canción referente en la
historia del heavy metal, creo que de este himno no hace falta decir
nada más.
3 –
The Number of the Beast – 1982
Es el disco que lo cambia todo en el mundo de Iron Maiden, y que
también tiene una gran repercusión en la historia del Heavy Metal.
Tras la salida de Di'Anno de la banda, los británicos ya tenían en
el punto de mira al cantante de la banda Samson, un tal Bruce
Dickinson. Las dos bandas habían tocado juntas en algún concierto y
habían establecido cierta amistad. Los miembros de la doncella de
hierro ya estaban interesados en la voz de Dickinson y cuando Di'Anno
abandonó Maiden fueron a preguntarle a Bruce si estaba interesado,
este último se mostró un poco reacio al principio pero finalmente
sí accedió a hacer unas pruebas y así nace para mí la época
dorada del mejor grupo de la historia.
Era hora de llevar la banda al siguiente nivel empezando por el nivel
musical. La banda dejaría un poco de lado el sonido crudo que le
acompaño durante los primeros discos para acercase para siempre
hacia la melodía gracias a la voz de Bruce. Jugando cada vez con
riffs más melódicos, complejos y elaborados, la banda firmó así
uno de los discos más importantes de todo el género, y es uno de
esos discos que junto al Black Album de Metallica han traspasado la
frontera metálica, siendo conocido por prácticamente todo el mundo.
La era Iron Maiden había llegado a un punto donde parecía que no
podía crecer más, con la entrada en el mercado estadounidense como
ya dije, el empezar a ser los cabezas de carteles en varios
festivales, llenar recintos enteros fuera de Gran Bretaña. Todo el
mundo adoraba a Harris y cía y Eddie era ya un icono a nivel
mundial.
Las 3 canciones a destacar del disco son Children of the Damned,
preciosa hasta un punto donde estalla con un solo y una parte 100%
Iron Maiden marcando lo que íbamos a escuchar en el futuro, donde
Adrian Smith y Dave Murray se salen. Un Dickinson que rápidamente
hace olvidar a Di'Anno con un despliegue vocal envidiable. La segunda
es la mítica The Number of the Beast, con ese estribillo que ha
pasado a la historia de la música. Pero quiero que paren máquinas
un momento para una de las mejores canciones de la banda... Hallowed
By The Name es un himno atemporal, tocando la perfección con los
dedos. De algunas canciones no suelo poner nada y suelo dejar un
vídeo, pues eso.
2 –
Seventh Son of a Seventh Son – 1988
Somewhere In Time puede decirse que tiene cierto punto experimental
con la introducción en los sintetizadores... podría decirse incluso
que fue una prueba de sonido para este SSOASS, que potenciaba todo lo
que habíamos visto en el álbum del Eddie cyborg y lo mejoraba hasta
unos niveles estratosféricos. Pese a lo que he dicho ya mil veces en
los discos de Maiden tras la vuelta de Bruce Dickinson, este es sin
duda su disco más progresivo, o al menos el que mejor incorpora los
elementos de ese subgénero, creando un disco con muchos matices
ocultos y con una riqueza que es como el buen vino.
La riqueza a nivel compositivo de la banda es posiblemente la mejor
de toda la década de los 80, incluso superior al disco que cierra
este top, siendo posiblemente el cúlmen de Maiden. ¿Por qué está
de segundo? Porque pese a que este es el cúlmen de Maiden para mí,
tiene un defecto, Can I Play With Madness mientras que el primer
disco es perfecto desde la primera hasta la última. Además, este
disco experimenta un poco más, siendo el primero la fórmula Maiden
llevaba hasta el cielo y quería destacar eso último, como las
cabalgadas, las partes épicas y demás llegan a otro nivel. Aquí se
juega más con otros elementos, por eso quería destacar el siguiente
disco como el mejor, porque es lo que yo entiendo como Iron Maiden
llevado al límite.
Este disco en cuestión sigue utilizando los sintetizadores que
empezaron a utilizarse en el Somewhere pero con un sonido mucho
mejor, algo que realmente le sentó muy bien a las canciones,
mientras que la voz de Bruce también tenía un sonido mejor que en
el disco cyborg.
Las 3 canciones que destaco son tres canciones que es de lo mejorcito
que Maiden ha parido en su historia. The Evil That Men Do tiene mara
mí el mejor estribillo de toda la historia de Iron Maiden, o sea,
que no se queda corto. Es una canción épica, desde el principio al
final, con unas guitarras espléndidas (la intro de la canción me
pone los pelos de punta cada vez que la escucho, esta me faltó en el
Resurrection) y con una letra fantástica, con ese clímax en el
estribillo mencionado. Dios, la pongo abajo que me estoy viniendo muy
arriba escribiendo estas líneas y me pierdo, de verdad.
Seventh Son of A Seventh Son es una canción olvidada no, lo
siguiente. 10 minutos de unos Iron Maiden que se superan a ellos
mismos, con todos los elementos que adoramos de ellos, pero con una
personalidad distinta que acompaña a este álbum para crear una obra
maestra, con un Bruce que realmente parece que ha hecho un pacto con
alguna entidad mística, porque esa voz no es normal, ya que
personalmente estamos en el mejor disco a nivel vocal de Bruce. Por
último pensaba en poner Moonchild, porque es otro himno, pero quiero
poner otra que ha pasado también un poco desapercibida... la canción
que cerraba el álbum y que cerró la década dorada de los
británicos, que ya nunca volverían a alcanzar este nivel. Only the
Good Die Young, tal vez una canción que no tiene tanto ese estilo y
esas características que predominan en otras canciones de Iron
Maiden, pero que es brutal, con unas guitarras que se llevan mis
aplausos, el riff principal es mágico. Debería hacer un top 10 de
canciones de Maiden...
Ojo
que se viene, el mejor disco de la (personalmente) mejor banda de la
historia... damas y caballeros... EL FUCKING POWERSLAVE.
1 –
POWERSLAVE – 1984
Ni Master of Puppets, ni Reign in Blood, ni Painkiller, ni Heaven And
Hell, ni Rust In Peace, ni Holy Diver, ni nada, nada. POWERSLAVE
La fórmula Maiden en su máximo esplendor, algo que los propios
británicos nunca fueron capaces de repetir (a excepción del SSOASS)
y mucho menos de alcanzar. Rescato un comentario de mi reseña de
este disco para explicar su nivel, y es que como dije, los discos
tras el retorno de la garganta de hierro no eran de mi agrado, porque
carecían de la epicidad de discos anteriores, sobretodo de este.
Powerslave es un ejemplo de como hacer un heavy metal rápido,
melódico, épico y todos los adjetivos similares que se le puedan
atribuir al disco. Es sencillamente el culmen del Heavy Metal
(refiriéndonos aquí al subgénero y no a la palabra Heavy utilizada
para englobar todo el Metal)
Siempre hablo mucho de Dickinson a la hora de hablar de Maiden, y es
que tengo debilidad por su voz, pero aquí a quien le voy a dar las
gracias es al señor Harris, compositor de gran parte de las magnas
obras que se presentan en este CD faraónico. Steve es una máquina,
escribiendo la mayoría de las letras y las líneas de guitarra (él
mismo dijo en una entrevista que cuando leáis en los créditos de
una canción Harris las guitarras también son suyas). Además para
mí en este disco están para mí las dos mejores canciones de Iron
Maiden de toda su historia, las cuales diré un poco más abajo.
La grandeza de este disco es algo que no soy capaz de describir, es
más, la reseña que realice en su día de este Powerslave es de las
que menos me convencen en toda la historia del blog, porque me parece
que no fui capaz de reunir la grandeza del disco en la reseña,
quedando algo corta en contenido y un poco sosa en comparación con
otras como la de The Book of Souls por no salirnos de Maiden.
¡Las 3 últimas canciones de este top! La primera es una de las
míticas... 2 Minutes To Midnight. Con una instrumental de lujo, con
unas guitarras Maiden como nunca habían sonado antes. Con un
estribillo que nació para ser cantado en directo. La segunda es mi
segunda favorita (valga la redundancia) de la discografía de Iron
Maiden. Aces High es impresionante desde el principio hasta el final,
con uno de los mejores riffs de la historia de los británicos, con
un Bruce a la altura de los dioses en el estribillo y en el final de
la canción, son un gran solo. La última es Rime to the Ancient
Mariner.. 13 minutos de Maiden que contiene todo lo bueno de la
banda... esta es una de las que prefiero dejar a descubrir.
Pues hasta aquí el TOP de la discografía de Iron Maiden, espero que
os haya gustado tanto como a mí redactarlo, lo siguiente será un
grupo que ya ha sido analizado en el blog pero no por mí, pero
también me hace ilusión hacer una reseña de uno de mis discos
favoritos de esa banda en particular. Espero que os guste. Nos
leemos, gracias.
Ari.
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